Dolor en articulaciones

 

Si bien es cierto, el ejercicio físico es una de las actividades que cualquier persona debiese realizar regularmente, también es cierto que el mismo puede conllevar a sufrir determinados dolores, especialmente cuando las personas no tienen la costumbre de realizar alguna actividad física. En estos casos, el dolor en las articulaciones puede volverse muy molesto, sobre todo, tras entrenar con ejercicios que impliquen cierto impacto en las mismas.

De esta forma, tus articulaciones pueden resultar inflamadas y doloridas, aunque también puedes tener los músculos un poco rígidos. Sin embargo, también debemos resaltar que existen varias maneras de ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones tras entrenar, algo que es muy importante que puedas conocer y aplicar de la mejor forma posible.

Cómo aliviar el dolor en las articulaciones

Es posible aminorar las molestias sufridas por tus articulaciones tras hacer ejercicio a través de tomar medidas preventivas antes del entrenamiento. En este caso, debes asegurarte de utilizar las zapatillas adecuadas, mismas que deben contar con el soporte necesario según el tamaño de tu cuerpo y el tipo de ejercicio que vayas a realizar.

En caso de sufrir de artritis, puedes intentar utilizar un soporte adicional en las articulaciones afectadas, bien se la rodilla, el codo o las muñecas. Evita hacer ejercicio de alto impacto aeróbico en caso de tener problemas con tus articulaciones. También se recomienda intentar caminar velozmente en lugar de trotar o realizar ejercicios aeróbicos de bajo impacto. Sin embargo, algo aún más importante es dedicar el tiempo necesario a calentar y estirar el cuerpo adecuadamente.

Dolor en articulaciones

Asimismo, es importante que puedas terminar tu periodo de ejercicio o acondicionamiento físico tomándote tu tiempo para enfriarte y estirar los músculos y articulaciones implicados en el mismo. Cabe destacar que los estiramientos son muy importantes, tanto en el inicio del ejercicio como al finalizarlo, puesto que ayudan a que tus músculos y articulaciones se relajen, evitando el dolor posterior.

Por otro lado, puedes tomar un baño tibio para relajarte. Recuéstate y relájate en tu bañera, pues un baño tibio ayuda a tu cuerpo en general tras una sesión de actividad física. Si no tienes el tiempo necesario para darte un baño largo, puedes al menos tomar una ducha tibia, más aún antes de acostarte para ayudar a tu cuerpo a relajarse y tener una noche de descanso.

Otra forma de aliviar el dolor en las articulaciones es aplicar una bolsa de hielo en la zona afectada. Si una de tus articulaciones tiende a hincharse tras el ejercicio, se recomienda invertir en una bolsa térmica de tipo más terapéutico.

Además, puedes untar tus articulaciones con un analgésico tópico o pomada para ayudar a aliviar el malestar. Existen muchos productos de este tipo en el mercado, donde puedes encontrar varios que te brindan una sensación fría y de cosquilleo sin tener que usar bolsas térmicas. Es posible que tengas que probar con varios productos hasta encontrar el de tu preferencia.

Otro excelente método para tratar un dolor en las articulaciones, es precisamente recibir un masaje tras el ejercicio. Existen masajes de cuerpo completo o algunos específicamente diseñados para tratar las zonas musculares y articulares que requieren de relajación. Incluso puedes pedir que froten aceites calientes para masajear los músculos y articulaciones adoloridas.

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