Cómo hacer sopas de ajo

Las sopas de ajo o sopas castellanas son muy fáciles de preparar, y además de ser deliciosas es una de esas recetas que recuerdan la cocina de las madres o abuelas, esto se debe a que se logra aprovechar las sobras de pan de otros días que se encuentran dentro de la alacena y no deseas tirar. Sin duda un plato tradicional y lleno de color.

Ingredientes:

1 litro de caldo de carne casero.

4 huevos.

250 gramos de pan duro, de preferencia pan blanco o de harina candeal.

3 dientes de ajo.

50 gramos de jamón serrano en taquitos.

1 cucharada de pimentón.

4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen.

Cómo hacer sopas de ajo

Preparación:

Para empezar a preparar esta sopa de ajo debes cortar las rodajas de pan, mientras dentro de un recipiente con aceite de oliva doras el ajo laminado, sin dejar que se queme. Cuando empiece a tomar color, debes retirar la sartén del fuego y añadirle el pimentón removiendo constantemente para que no se pegue.

Cuando tengas preparada las rodajas de pan, debes tostarlas dejando que logren adquirir el sabor a ajo y tomen el color que tiene el pimentón. Al momento que realices esta operación, debes colocar dentro de un recipiente el caldo casero para que lo tengas caliente y a la mano cuando lo tengas que necesitar.

Al momento que observes que cada una de las rebanadas de pan han adquirido un sabor a ajo y se encuentren tostados, los tienes que pasar a la cazuela, agregándole los taquitos de jamón junto al caldo casero que has calentado con anterioridad.

Deja que se cueza la mezcla durante unos 5 minutos aproximados, mientras aprovechas ese tiempo para escalfar los huevos que debes incluir dentro de la cazuela. Debes servir esta sopa de ajo caliente.

Puedes agregarle más ingredientes a tu sopa de ajo o sopa castellana y de esa forma darle otro sabor para que la puedas degustar, agregándole unos trocitos de chorizo para que su sabor se intensifique. Puedes utilizar caldo logrando que tu sopa se encuentre lista en  poco tiempo y tenga ese sabor tradicional que distingue a este plato. Y, con el añadido de pan podrás obtener una consistencia más espesa para que no sea una sopa blanda, un aspecto que no le agrada a algunas personas.

Esta sopa de ajo se caracteriza por ser un plato que se encuentra dentro de la cultura gastronómica, al ser un plato típico dentro de la cultura de varias regiones, ya que es muy saludable por la integración de cada uno de los ingredientes que cuenta, además de ser una de las recetas con un costo reducido y fácil de preparar.

La sopa de ajo es una tradición para la época de frío, que hace ya un tiempo, ayudaba a que se combatiera el calor y el hambre al mismo tiempo, lo que la convirtió en una de las recetas más consumidas en varias de las regiones frías y pobres del país, y ahora es una de las más mejores recetas.

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