Cómo tomar proteínas ¿en leche o en agua?

Pese a lo que muchos puedan decirte, es importante no dejarte influenciar por personas que no tengan ni la menor idea de lo que hablan, especialmente cuando se trata del cuidado de tu salud y de tu estado físico. En este sentido, si alguien te brinda algunos consejos acerca de la forma de tomar proteínas, es importante que puedas asegurarte de ser una fuente confiable.

¿Puedo tomar proteínas en leche?

En primer lugar, debes considerar que tu hígado es un órgano muy eficiente, siendo capaz de sintetizar los alimentos aun cuando los mezcles en una sola toma o ingestión; pero no debes abusar de ello, pues la respuesta puede reflejarse en molestos granos de la cara, espalda y otras partes del cuerpo. Aunque debemos aclarar que esto no sucede de la misma forma en todas las personas, pues los granos pueden deberse a otros factores como mala alimentación, consumo bajo o nulo de agua, consumir alcohol, cambios hormonales, falta de higiene personal, entre otros.

Cómo tomar proteínas ¿en leche o en agua?

Cuando consumes la proteína en leche, bien sea inmediatamente después de entrenar o en cualquier momento de tu día, lo único que haces es complicarle el trabajo al hígado, además de ingerir un exceso calórico que se refleja en la acumulación de grasa en la zona abdominal. En este caso, puedes verte más grande, pero debido a que empiezas a acumular grasa en el tejido adiposo, incluyendo áreas como: brazos, piernas y rostro.

Además, la mayoría de los suplementos proteínicos, mismos que no sólo contienen aminoácidos, sino también cuentan con ciertas cantidades de carbohidratos, minerales, vitaminas, entre otros compuestos; ya poseen una combinación adecuada para ser consumidos en agua, puesto que este líquido es considerado como el solvente universal por excelencia.

¿Por qué debo tomar las proteínas en agua y no en leche?

Como hemos mencionado, el agua es el solvente universal, por lo que cualquier soluto o compuesto que se añada a la misma, pueden disolverse mejor, facilitando la absorción eficaz por parte del organismo humano, además que de por sí, el agua mejora la circulación sanguínea de forma considerable, permitiendo el transporte adecuado de nutrientes a todo el cuerpo, al mismo tiempo en que agiliza el transporte de toxinas y otros desechos para expulsarlos fácilmente.

Asimismo, el agua permite la absorción de este tipo de suplementos de una forma muy rápida, así como de la forma más óptima y sin desperdiciar, algo que no sucede cuando consumes proteínas en leche u otras bebidas.

Conclusión

En general, podemos decir que la alimentación incorrecta, generada por un exceso de grasas saturadas consumidas en una sola vez, puede ayudar a una mayor acumulación de grasa, y poner a trabajar más las glándulas sebáceas, e incluso, pueden contribuir al aumento del riesgo de la aparición de granitos. En estos casos, la mejor solución es asear la piel siempre, evitando una dieta excesiva en grasas saturadas y azúcares refinados. Además, el consumo de agua durante el día y los descansos entre series de entrenos, son fundamentales para ayudar a eliminar las toxinas y los radicales libres.

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