Conoce los principios del entrenamiento físico

Cuando escuchas hablar de entrenamiento físico es probable que pienses en una serie de actividades que puedes realizar de cualquier forma, o quizá pienses en esfuerzos físicos que sólo pueden desarrollar personas con determinadas características, pero en estos casos, es importante que conozcas los principios del entrenamiento físico, algo que te ayudará a conocer las etapas necesarias para obtener un buen estado físico.

Bien sea el principio de adaptación, principio de la progresión, principio de la continuidad y principio de la alternancia, estos principios del entrenamiento físico son de gran importancia para obtener una buena condición física, y con ello, un efectivo entrenamiento en diferentes disciplinas.

Principios del entrenamiento físico: adaptación

El organismo humano cuenta con la capacidad de resistir y habituarse rápidamente ante cualquier actividad física, ya que ésta provoca cambios fisiológicos en el cuerpo a nivel de aparatos y sistemas. Tras practicar algún deporte, tu organismo puede advertir de un desgaste, provocando así la disminución momentánea de tu nivel físico. Aunque luego, tu cuerpo puede recuperarse para lograr superar el nivel anterior, adaptando tus aparatos y sistemas a este esfuerzo, algo a lo que se le denomina sobre compensación.

Principios del entrenamiento: progresión

También es importante mencionar que tu organismo posee la capacidad de resistir progresivamente ante esfuerzos cada vez superiores. Aunque para que realmente puedas lograr un aumento en tu nivel de condición física es muy importante que puedas acrecentar de forma paulatina el ejercicio físico, tanto en cantidad como en intensidad, y de esta forma, puedas encadenar con el tiempo todas las sobre compensaciones producidas, alcanzando así una adaptación sólida.

Además, este principio también recibe el nombre de Principio de aumento progresivo de la carga de entrenamiento, puesto que, como lo indica su nombre, se encarga de marcar la elevación gradual de las cargas utilizadas en los entrenamientos, además del aumento del volumen y la intensidad de los ejercicios que realizas. En este sentido, resulta fundamental considerar que las cargas del entrenamiento deben tener una relación directa con tu nivel de rendimiento.

Principios del entrenamiento: continuidad

Para un mejor aprovechamiento de todos los efectos positivos que puede producir el ejercicio es necesario practicar estas actividades de forma habitual, especialmente aprovechando las ventajas que proporcionan las sobre compensaciones. Aunque un detalle muy importante que debes tomar en cuenta es que, si no tomas el suficiente tiempo de descanso tras el último entrenamiento es muy probable que pierdas los efectos positivos que la sobre compensación hubiese generado.

En este caso, sin el descanso apropiado aun cuando hayas tenido una buena adaptación al esfuerzo, empezarás a notar una pérdida progresiva de tu condición física que hubieses obtenido. Por este motivo, además de necesitar de un tiempo prudencial de descanso para tu cuerpo, también es provechoso aumentar la práctica de ejercicio físico de forma gradual, evitando que los músculos del cuerpo terminen acostumbrándose a determinado esfuerzo.

Principios del entrenamiento: alternancia

Al momento de planificar un entrenamiento, es necesario pensar en alternar las cargas de trabajo. También debes saber combinar tus distintas cualidades físicas, respetando los períodos de recuperación correspondientes. La recuperación apropiada del organismo ante el cansancio producido por la actividad física es de vital importancia. Sin embargo, este tiempo también puedes aprovecharlo de diferentes formas, pudiendo desarrollar otros aspectos del cuerpo.