La carnitina es una sustancia creada por el propio organismo humano, sintetizada específicamente en el hígado y riñón, a partir de aminoácidos como la lisina y metionina. Además, esta sustancia es fundamental para que los ácidos grasos ingresen a la mitocondria, donde son transformados en energía. En este sentido, también es posible obtener carnitina de suplementos, donde es más conocida como L-carnitina.
Cabe destacar que cuando el cuerpo produce poca L-carnitina, las grasas se encuentran con mayores dificultades para oxidarse, por lo que son eliminadas muy lentamente de las células y del torrente sanguíneo. La mayoría de los adultos con una dieta sana y equilibrada, tiende a comer cerca de 50 mg de carnitina al día, sin la necesidad de suplementos.
Además, debemos mencionar que diversos estudios han demostrado los beneficios de consumir L-carnitina para adelgazar, siempre que pueda ser combinada con deporte y ejercicio físico activo. Si deseas probar L-carnitina para perder peso, lo ideal es hacerlo con tres cuartos de hora antes de realizar la actividad física, o media hora antes de cualquier comida. Pero recuerda que sin movimiento corporal que estimule el consumo calórico, la L-carnitina no rendirá ningún efecto.
Fuentes naturales de L-carnitina
- Carne de oveja: 210 mg/100 gramos.
- Carne de cordero: 78 mg/100 gramos.
- Carne de ternera: 64 mg/100 gramos.
- Pollo: 7,5 mg/100 gramos.
- Levadura: 2,4 mg/100 gramos.
- Leche: 2,0 mg/100 gramos.
- Germen de trigo: 1,0 mg/100 gramos.
- Cacahuetes: 0,1 mg/100 gramos.
- Coliflor: 0,1 mg/100 gramos.
Síntomas de deficiencia de L-carnitina
- Agotamiento físico.
- Disminución de la función cardíaca.
- Dolor precordial.
- Arritmias.
- Disfunción hepática.
- Hígado graso.
- Predisposición a las infecciones.
- Atrofia muscular.
- Infertilidad masculina.
- Alteración en el crecimiento de los niños.
Principales usos de la L-carnitina
La carnitina es utilizada para contribuir en la pérdida de peso, especialmente funcionando como transporte adecuado de los ácidos grasos; así como también para aumentar la energía física en deportistas, como ‘vitamina cardíaca’ en pacientes que padecen de insuficiencia cardíaca; en casos de síndrome de fatiga crónica, en casos de dislipidemia, enfermedad de Alzheimer, disfunción hepática, pacientes de insuficiencia renal, algunos casos de infertilidad masculina, entre otros.
Recomendaciones en el uso de suplementos de L-carnitina
Para que la L-carnitina alcance su efecto, se recomienda que, adicional al consumo de alimentos fuente de este compuesto, puedas mantener una dieta baja en azúcares e hidratos de carbono. Además, algunas personas son remitidas al uso de suplementos de L-carnitina, pero esto requiere una recomendación expresa del nutricionista, pues una ingesta inadecuada, puede ocasionar varios problemas de salud.
Se estima que una persona de características normales, necesita al menos 1000 mg de L-carnitina para bajar de peso, mientras que las personas con obesidad, requieren unos 2000 mg. En este sentido, una buena forma de conocer si cuentas con el consumo de las cantidades necesarias de L-carnitina, es en la revisión de tu energía, es decir, si empiezas a sentirte con más energía, es señal de que el nivel de L-carnitina que estás utilizando comienza a quemar grasa corporal. En cualquiera de los casos, es necesario consultar con el médico antes del uso de L-carnitina para adelgazar.
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