Relación de radicales libres, antioxidantes, y cáncer

Los radicales libres son átomos que muy reactivos como consecuencia de tener un electrón de valencia desapareado, en otras palabras, que por la falta de electrón en la órbita exterior, dispone de una carga negativa. Cada uno de los electrones de la capa exterior son los encargados de jugar un papel de gran importancia en las intenciones con los demás átomos. Al momento que se forma un radical libre, se puede crear una serie de reacciones que tienen un efecto dominó que alteran a las demás células.

Como consecuencia de que los radicales libres son muy reactivos, se ha logrado asociar con una serie de efectos biológicos negativos. Siendo los radicales libres los que tienen la capacidad de modificar las demás moléculas que se encuentran dentro del cuerpo, dando como respuesta un daño a la estructura celular y por esa razón se evita que las células funcionen de forma correcta.

El daño provocado puede ser con la intoxicación de los nucleótidos, lo que da como consecuencia un daño en el ADN e incrementa la probabilidad de que se padezca de tumores. Además los radicales libres, también tienen la responsabilidad de poder padecer tumores dentro del organismo. Siendo los radicales libres los que son responsables de la desnaturalización de las estructuras proteicas, provocando que las proteínas no puedan operar de forma correcta. En otras palabras, los radicales libres conducen a un daño celular, que es una vía segura que tiene como meta el cáncer, envejecimiento y una serie de enfermedades.

Relación de radicales libres, antioxidantes, y cáncer

En un sentido diferente los antioxidantes ayudan a poder reducir el efecto que tienen los radicales libres en el cuerpo. Siendo los antioxidantes unas moléculas que puedan interactuar en una forma segura con los radicales libres. Así mismo, los antioxidantes ayudan a que se puedan disminuir las reacciones de una cadena negativa, inducidas por radicales libres y de esa forma proteger las membranas celulares como consecuencia de un daño oxidativo. Pueden ser endógenos de origen del propio organismo, o exógenos originados fuera del cuerpo, por medio de los alimentos o los suplementos. Los antioxidantes principales son exógenos, encontrándose en las vitaminas C y E y el beta-caroteno.

Efecto real de los antioxidantes para prevenir el cáncer

Tanto en los estudios de laboratorio como en los estudios realizados con animales, se ha logrado indicar que la presencia de las mayores concentraciones de antioxidantes exógenos ayuda a que se pueda impedir el daño de los radicales libres que se ha asociado con la presencia de cáncer. Siendo una razón por la que los investigadores se han dedicado a poder ayudar a reducir el riesgo de padecer o de morir por cáncer dentro de los seres humanos.

Otro estudio que se realizó con el consumo de vitaminas y su relación con el cáncer, se encargó de poder examinar que al tomar suplementos con vitamina E o vitamina C,  ambas amortiguan la incidencia que tiene el cáncer en varones mayores de 50 años. Aunque aún queda mucho por investigar, lo que se recomienda es que se tenga precaución al considerar que los antioxidantes salvan del cáncer.

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