Frutas astringentes

 

Al hablar de un alimento astringente nos referimos a aquel que posee propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias y antihemorrágicas. El efecto estíptico o astringente de los productos alimenticios que son incluidos dentro de la alimentación regular, se debe a la presencia de sustancias llamadas taninos, que son compuestos fenólicos que cuentan con la capacidad de formar una capa en la mucosa digestiva, protegiéndola frente a los ataques externos. Por lo general, estos alimentos suelen producir una sensación de sequedad y amargor en la boca.

En el caso de las frutas astringentes, su contenido en taninos, se reduce durante el proceso de maduración y cocción. Un claro ejemplo pueden ser las manzanas, que se destacan por su riqueza en taninos y por el sabor áspero de algunas variedades. Por el contrario, las manzanas asadas al horno tienden a perder parte de dichos taninos durante su cocción, de manera que no tienen el sabor astringente que suele caracterizarlas en su estado natural.

De esta forma, los denominados taninos son los encargados de ayudar a cicatrizar la piel, acelerando la curación de heridas, así como de frenar la diarrea, contando también con propiedades antioxidantes y antibacterianas. En estos casos, las frutas astringentes más interesantes pueden ser:

Los plátanos: son una fuente importante de potasio, algo muy necesario si estuvieses recuperándote, por ejemplo, de una diarrea o una deshidratación. Además, no estimula en demasiado la peristalsis del intestino.

Frutas astringentes

La manzana: preferiblemente sin piel y asada, o después de pelarla dejándola al aire o con unas gotas de limón para su oxidación, también es una excelente alternativa en frutas astringentes.

El membrillo: es un fruto de color amarillo-dorado brillante al estar maduro, periforme, de 7 a 12 cm de largo y de 6 a 9 cm de ancho. Su pulpa es dura y muy aromática. Además, el membrillo es demasiado duro, astringente y agrio, por lo que no es usual comerlo crudo, a menos que sea escarchado. Generalmente se usa para hacer mermelada, compota y pudín, aunque puede pelarse para luego asarlo.

La acerola: este es un fruto de un diámetro de entre 1 a 2 centímetros y 20 g de peso, de piel lisa, de color rojo o amarillo, y pese a su semejanza externa con la cereza, en su interior presenta gajos y tres carozos apretados muy duros. Además de ser una fruta astringente, la acerola posee entre 20 a 30 veces más vitamina C que una naranja. También es rica en vitamina B6, B1, A, flavonoides y minerales esenciales.

Los caquis: además de taninos, los caquis contienen mucílagos, un tipo de fibra soluble capaz de regular el tránsito intestinal y ayudar a expulsar los residuos fecales y tóxicos que se van acumulando. Esta es una fruta que resulta útil en caso de gastritis y aparición de llagas en la piel o boca.

La granada: por su parte, la granada es una de las frutas que posee un mayor contenido en taninos, siendo una de las frutas más astringentes y eficaces para desinflamar los intestinos.

Otros alimentos protagonistas dentro del grupo de las frutas astringentes pueden ser: los arándanos, los dátiles, entre otros.

Write a comment:

Your email address will not be published.

Logo_footer   
     © 2020 Online Personal Trainer