Qué es la fuerza máxima y su importancia

La palabra fuerza quiere decir capacidad física básica que genera tensión intramuscular frente a una resistencia, independientemente de que se genere o no movimiento. Si revisamos el valor de la palabra de una manera amplia, seguramente nos viene a la mente con facilidad la idea de vigor, poder ya sea físico o mental, resistencia a dificultades y otras muchas que nos pueden ayudar a catalogar la impresión que nos transmite la manera en que se realiza una acción o la imagen de algo o alguien. El cuerpo humano cuenta con una herramienta especializada para producir el movimiento de los huesos y con ello su masa en el espacio, es sistema muscular, etc.

De hecho, el desarrollo de la fuerza máxima queda restringido sólo para atletas con años de experiencia y entrenamiento. Esto se debe en que en principiantes puede existir un alto riesgo de lesiones musculares, ya que el sistema muscular no se encuentra preparado para resistir intensidades máximas. Su desarrollo en el deporte es importante debido a que la potencia cumple un papel fundamental en casos como: lanzamiento de jabalina, salto en garrocha, lucha, boxeo, saltos en vóley, básquet, entre otros.

Tanto hombre como mujeres, en su desarrollo evolutivo, parecen tener la capacidad para aumentar su fuerza. Además, logran ganar un nivel máximo entre los 20 y 25 años, a partir de este momento se reduce de manera considerable. Existen varios factores de tipo biomecánico que condicionan el desarrollo de la fuerza, relacionados con la constitución  de cada individuo. Por otra parte hay factores fisiológicos que también influyen en el desarrollo de ésta como: longitud del músculo, el tono muscular o la eficiencia neuromuscular.

Importancia de la fuerza máxima

La potencia física es igual al producto entre la fuerza y la velocidad, es por ello que para aumentar la potencia muscular debemos aumentar la fuerza y velocidad. Si aumentamos la flexibilidad tendremos un mayor ángulo y recorrido muscular y esto favorecerá a un mayor recorrido de velocidad. Para el desarrollo de la fuerza máxima debemos realizar ejercicios con pesas o maquinas a una intensidad de 90 o 98% de nuestra máxima capacidad muscular.

La técnica de cada ejercicio debe ser controlada por un entrenador idóneo, ya que a estos niveles de entrenamiento las lesiones pueden ser comunes. La entrada en calor antes de movilizar dichas cargas debe ser estricta, puesto que un desgarro muscular puede significar el fin de una carrera deportiva llena de sacrificios. Para aumentar la flexibilidad una vez incluidos los ejercicios de sobrecarga, debemos realizar un buen plan de flexibilidad, especialmente en los músculos trabajados en esa sesión.

Para aumentar la velocidad de forma efectiva, debemos realizar en otro momento un entrenamiento que sea beneficioso de la velocidad de movimiento. Estos ejercicios los podemos realizar con pesos ligeros y alta velocidad de ejecución, o puede ser a través de ejercicios específicos del deporte. Nuestros músculos tienen la capacidad de contraerse generando una tensión y cuando se aplica contra una resistencia se ejerce una fuerza.